Reto desafiante al cloro

(Por Sara Bongiovanni) El backstage de una tarde de trampolín, sol y chapuzones, es una sesión de mantenimiento del agua de la piscina, con un cóctel de cloro, alguicidas, clarificador, y algo más, que a pesar de su toxicidad (baja obviamente) hasta hace un tiempo no quedaba otra. Hay sin embargo, dos sistemas interesantes que son bactericidas naturales: la ionización y la ozonización ¿te suenan? Vale decir, que ambos ofrecen mejorar la calidad del agua reduciendo el uso del cloro en un 90%.

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Cuando se usa un ionizador u ozonizador eléctrico debe estar al menos 4 horas antes funcionando para tener el agua en condiciones óptimas.
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Los iones además son excelentes ahuyentando insectos y anfibios, ojo no les hace daño sino que a éstos les molesta la presencia de los iones de cobre.
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Cada cuatro años se cambia en el ionizador solar el electrodo central. El material plástico es resistente al sol y al agua.
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La versión solar, ioniza hasta 100 mil litros de agua mientras que los modelos eléctricos (ionizador u ozonizador) lo hacen hasta 60 mil litros.
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La ventaja del ionizador solar es que funciona todo el día mientras que las opciones eléctricas sólo lo hacen mientras el filtro está en funcionamiento.

Usando una pequeña parte de cloro, el tema del olor, la irritación cutánea y en los ojos, la decoloración de las prendas, y el cabello o piel estropeada, a ese nivel no preocupa.
Si hablamos de ionizadores, hay dos modelos: uno es eléctrico (con mínimo consumo) tiene el tamaño de una caja de zapatos y va conectado en serie después del filtro, la bomba y la caldera (si tuviera) cuesta $ 4.500 y funciona mientras lo hace el filtro.
El otro es solar ($ 1.700), de aspecto similar a la boya de cloro, provisto de un panel solar pequeño que capta la energía del sol y la convierte en electricidad (inofensiva). Básicamente, consiste en un proceso que realiza el electrodo de cobre, el cual controla y limita el crecimiento de microorganismos, algas y parásitos a través de los iones que suelta y se mezclan con el agua.
Por último, están los ozonizadores, el generador es similar al ionizador eléctrico en tamaño,  instalación y funcionamiento, con la diferencia que en vez de soltar iones para controlar los microorganismos trabaja con moléculas de ozono, el costo es de $5.000.
El cloro es necesario (al menos en un 10%) por dos razones principales, entre otras, primero porque elimina bacterias que otros no logran, y segundo para mantener el agua que se oxida y aparece turbia por los bronceadores, fluidos corporales, polvo…
Un dato más. La firma Nesi comercializa estos artefactos desde Buenos Aires.

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