AutoShow y un final no deseado

Por estrictas cuestiones de “pasión por los fierros”, que llevo en la sangre desde siempre, en estas últimas semanas estuve ligado en cierta manera a la organización del Salón del Automóvil AutoShow 2009. Hace poco conocí a su organizador, Daniel Llorens, y a partir de mi contacto permanente con el mundo del automóvil, colaboré en algunas cuestiones relacionadas a expositores y personajes invitados. No es mucho lo que aporté en este breve tiempo aunque, debo reconocerlo, incorporé a AutoShow a mi pasión por este mundo del automóvil y estaba muy entusiasmado con una exhibición poco común para esta ciudad de Córdoba, con presencia de algunas Ferrari, Maserati, algunos ingleses, Alfa Romeo, muchos otros ya conocidos en nuestro mercado, autos antiguos, el gran “Pepe” Froilán González, diseñadores de nivel internacional, y muchas atracciones que conformaban algo distinto a lo conocido. Por eso me embarqué colaborando con los organizadores, entusiasta de materializar este proyecto, ya muy avanzado cuando tomé contacto con él.
El llamado de Daniel Llorens sonó distinto a lo habitual: “José, lamento informarte que hemos decidido aplazar AutoShow 2009. Con todo el dolor que siento por trabajar en él desde hace tiempo, nos vemos obligados a postergarlo en fecha a confirmar”.
Comparto su decisión. Importantes expositores confirmados que se bajaron a último momento por distintas razones y otros que no terminaron de confirmar a pesar de estar en tratativas desde hacía tiempo, motivaron la suspensión.
“Intento mantener la seriedad profesional que siempre he tenido, incluso en las numerosas FICO que organizamos. No puedo defraudar a la gente y expositores. Prefiero perder en lo personal y dar un paso al costado. Pero te confirmo la decisión de hacerla el año próximo, a partir de marzo, en fecha a confirmar”.
Un tropezón no es caída, como dicen. Una decisión difícil pero responsable. Seguiremos de cerca la confirmación de la nueva fecha.

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