A los botes: oportunidades y dificultades para mudar tu empresa (o tu familia) a Uruguay

Con el diario del lunes -y el de todos los días-, en Uruguay no paran de sonar los teléfonos con el código internacional +54. El interés de los argentinos por llevar su vida, familias y empresas al vecino país viene desde hace un par de años, pero se intensificó en el último tiempo. Una consultora uruguaya y el cónsul general en Córdoba nos describen oportunidades y amenazas. 
 

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La pandemia del virus COVID-19 agarró al país en una profunda crisis y la gestión del nuevo gobierno -lejos de entusiasmar- está poniendo en alerta a cada vez más personas.

Ante este escenario muchos coterráneos comenzaron a consultar sobre las posibilidades de asentarse del otro lado del Río de la Plata, atraídos por los beneficios impositivos y por la proximidad entre ambos países.

Tanto el gobierno de Tabaré Vázquez como el de Lacalle Pou han favorecido la atracción de inversiones en suelo uruguayo.
 


Carlos Pico Consultoras Tributaria, Legal y Contable tiene base en Montevideo (y oficinas en Buenos Aires) y suma 32 años de experiencia en asesoría. Desde el año pasado organizan charlas informativas para argentinos que estén estudiando tramitar su residencia legal o fiscal en Uruguay. Las preguntas se intensificaron con la pandemia y comenzaron a atender un promedio de 10 consultas diarias, a lo que se suman talleres vía Zoom. 

Veamos qué demanda el trámite para la residencia fiscal y legal, que según explican son dos conceptos separados pero complementarios. 

-Residencia fiscal: de acuerdo a lo que explicó uno de los miembros del equipo de la consultora,  “es un concepto dinámico (se debe acreditar todos los años) que surge porque Uruguay y Argentina tienen diferentes conceptos de imposición a la renta. Uruguay tiene un concepto territorial por el cual aplica impuestos a las rentas generadas dentro del territorio y a los bienes en Uruguay. Argentina tiene un concepto de renta mundial, que considera la residencia de la persona para gravar su actividad”. Esta distinción es uno de los motivos por el cual estamos hablando del tema. 

Para adquirir la residencia fiscal se debe dar al menos una de las siguientes condiciones:
-Permanecer más de 183 días al año en territorio uruguayo (permanencia real en un año civil completo y se mide del 1 de enero al 31 de diciembre).
-Que el centro principal de negocios de la persona sea en Uruguay (implica que reciba sus mayores ingresos dentro del territorio uruguayo, el estado compara los ingresos que la persona tiene en otras partes del mundo).
-Que la base de los intereses vitales de la persona se encuentre en Uruguay (por ejemplo, la persona que haya tenido y criado sus hijos en Uruguay).
-Que su base de intereses económicos se encuentre en Uruguay (este punto sufrió modificaciones que entrarán en vigencia el próximo mes). 

Las modificaciones en el último punto tienen que ver con una variación en los montos de la inversión que ahora implica: 
-Una inversión en bienes inmuebles de US$ 380.000 más una permanencia mínima de 60 días en un año civil, o
-Una inversión en un emprendimiento productivo de US$ 1.600.000 y emplear un mínimo de 15 personas.

Vale aclarar que la obtención de la residencia fiscal uruguaya no implica la pérdida de la residencia fiscal argentina.  

Qué se tributa en Uruguay como residente fiscal: 
-Las rentas de capital que obtengan dentro de Uruguay (por activos localizados en el país, no tributa por activos en el exterior).
-Las rentas de trabajo que obtengan en el país (como dependiente o independiente).
-Las rentas de trabajo que obtengan fuera del país siempre que la persona trabaje
en relación de dependencia para una empresa contribuyente de impuestos en Uruguay.
-Las rentas derivadas de intereses y dividendos que se obtengan fuera de Uruguay. La tasa de imposición en este caso es de 12%.

Además, para los extranjeros que sean residentes uruguayos, el país exime del pago impuestos de intereses y dividendo generados en el exterior por el año que se obtiene la residencia y cinco más. 
 


Cómo obtener la residencia legal:
En el caso de los cordobeses, el trámite se incia en el Consulado General en Córdoba cuyo cónsul es Álvaro Barba García. En diálogo con InfoNegocios, Barba García explica que se puede iniciar la presentación de la documentación y la carga al sistema pero habrá que esperar a la apertura de la oficina consular para completarlo.

Documentación para solicitar la residencia legal: 
-DNI / Pasaporte
-Certificado de antecedentes penales
-Certificado de vacunas que exige Uruguay
-Constancia del domicilio donde reside

En tiempos normales un trámite de residencia demora alrededor de 60 días. El cónsul de Uruguay en Córdoba señala que desde su gestión las consultas han sido sostenidas pero han percibido un aumento en el último tiempo. 
 

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