Storni y el caso Arcor: ¿quién dijo que nadie se acuerda del segundo?

La charla de la víspera que más me gustó del 3er Congreso de Marketing fue la de Guillermo “Willy” Storni, nieto de la poetiza Alfonsina Storni y gerente de negocios de Arcor. Con un sólido sustento académico y gran honestidad intelectual, Storni explicó cómo hay empresas pioneras en determinados productos o mercados y empresas desarrolladoras, aquellas que toman un producto, lo mejoran e innovan en su marketing, distribución o producción. Pese a que hay un precepto que dice que nadie recuerda los segundos que llegaron a una meta, Storni explicó cómo “descubrió” las barras de cereal (un producto desarrollado por Felfort, la pionera del rubro) y cómo Arcor lo desarrolló hasta expandir insospechadamente la categoría y dominar completamente ese rubro en market share. (Más sobre innovación y la visión de Storni en la “lupita” que lleva a Ver Nota Completa).

  • Aunque es muy fácil tomar la bandera de “innovar o morir”, lo cierto es que son pocas las verdaderas innovaciones, aquellas “disruptivas” que crean una nueva categoría de consumo y cambian la vida de la gente (telefonía celular, por ejemplo). La mayoría de las innovaciones se dan a partir de productos ya desarrollados.
  • Por eso son frecuentes las innovaciones en extensión de línea de productos (un nuevo sabor, una nueva variedad, por ejemplo); las innovaciones que significan traer un producto a un mercado donde no estaba o, incluso, las innovaciones más significativas que dan un salto un poco más grande inaugurando una nueva generación de un producto ya impuesto.
  • Entre colonizadores o pioneros (los que introducen un producto en el mercado) y desarrolladores (los que lo toman, lo potencian e innovan sobre alguno de sus puntos), Arcor está claramente en la segunda categoría. Su producto emblema, el Bon o Bon, parte de la base de uno de los bombones de Garotos, lo mejora, lo amplia, lo “independiza” y extiende su marca y sabor a muchos otros productos.
  • Arcor siempre se destacó por su integración vertical que le permitió precios muy competitivos y -más adelante- por una aceitada logística que le permiten estar “en todos lados”.

- El marketing de sus productos ya es tan bueno como su sistema de producción y su distribución?-, le preguntamos a Storni.
- Lo debería decir alguien que mire la organización desde otro lugar, pero yo creo que hemos avanzado mucho en marketing. De todas formas, desde un principio los fundadores de la empresa tenían claro qué vendían, a quién le vendía y cómo le vendían. ¿No es eso el marketing?

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