Los gastronómicos piensan en una rebelión fiscal (invitarían a los clientes a no pedir factura y premiarían el pago contado)
"Tenemos los huevos al plato... si me permitís la metáfora gastronómica", nos dice el titular de un resto-bar que integra un grupo que promueve "sotto voce" una rebelión fiscal. "No tenemos muchas ganas e incentivos para cobrarle al cliente el 21% de IVA y 4% de II.BB.", explica. La idea es "premiar" a los clientes que paguen en efectivo con un bono del 10% para su próximo consumo y "repartir" el ahorro.
"Tenemos los huevos al plato... si me permitís la metáfora gastronómica", nos dice el titular de un resto-bar que integra un grupo que promueve "sotto voce" una rebelión fiscal. "No tenemos muchas ganas e incentivos para cobrarle al cliente el 21% de IVA y 4% de II.BB.", explica. La idea es "premiar" a los clientes que paguen en efectivo con un bono del 10% para su próximo consumo y "repartir" el ahorro.