ADN Papel no llegó al año (otro producto periodístico que muere en el intento)
Apareció en septiembre de 2010 con un informe sobre cuál de los súper e hipermercados en Córdoba era el más barato y parecía que se iba a comer la chancha. Con un equipo periodístico comandado por la dupla Orestes Lucero-Tomás Méndez, ADN Papel se presentó como un nuevo medio de comunicación que venía a romper con viejos esquemas y estereotipos (por ejemplo, no recibía publicidad oficial). Pero, al igual que muchos otros buenos intentos periodísticos, quedó en el camino. Primero, a dos meses de su lanzamiento, el publicista decidió dar un paso al costado; luego, se demoró la salida de la primera edición de 2011, y tras un par de números, en mayo se editó por última vez ADN Papel. Llegó a editar 5.000 ejemplares, de los cuales se vendían unos 4.000.
Apareció en septiembre de 2010 con un informe sobre cuál de los súper e hipermercados en Córdoba era el más barato y parecía que se iba a comer la chancha. Con un equipo periodístico comandado por la dupla Orestes Lucero-Tomás Méndez, ADN Papel se presentó como un nuevo medio de comunicación que venía a romper con viejos esquemas y estereotipos (por ejemplo, no recibía publicidad oficial). Pero, al igual que muchos otros buenos intentos periodísticos, quedó en el camino. Primero, a dos meses de su lanzamiento, el publicista decidió dar un paso al costado; luego, se demoró la salida de la primera edición de 2011, y tras un par de números, en mayo se editó por última vez ADN Papel. Llegó a editar 5.000 ejemplares, de los cuales se vendían unos 4.000.